El Reglamento de Instalaciones Térmicas en los edificios podría ver la luz durante el 2020, una vez que a finales de 2019 finalizó el periodo de alegaciones al borrador del reglamento.
El mítico RITE 2007, que ha establecido las condiciones de las instalaciones de calefacción, climatización y agua caliente sanitaria, puede tener las horas contadas. El sector espera con expectación el nuevo Real Decreto que modifique el actual RITE.
De esta forma, el presente 2020 representa un cambio de paradigma en el mundo de la instalación ya que dos de las principales normas como lo son el RITE y el Código Técnico de la Edificación serán modificados.
Se pretende de este modo adaptar el Reglamento de Instalaciones Térmicas de los Edificios a las nuevas Directivas que se han publicado relativas a la eficiencia energética de los edificios y a las energías renovables. Dicha adaptación ha de estar aprobada a más tardar el 10 de marzo de 2020.
Además de revisar la norma, de acuerdo a las directivas europeas de eficiencia energética en edificios recientemente modificadas, se pretende incorporar requisitos en materia de fomento del uso de energía procedente de fuentes renovables.
Las Directivas que modificaran el RITE
-Directiva (UE) 2018/2002, del Parlamento Europeo y del Consejo, de 11 de diciembre de 2018, por la que se modifica la Directiva 2012/27/UE relativa a la eficiencia energética
-Directiva (UE) 2018/844 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 30 de mayo de 2018, de 30 de mayo de 2018, por la que se modifica la Directiva 2010/31/UE relativa a la eficiencia energética de los edificios.
-Directiva 2012/27/UE relativa a la eficiencia energética, así como la Directiva (UE) 2018/2001, del Parlamento Europeo y del Consejo, de 11 de diciembre de 2018, relativa al fomento del uso de energía procedente de fuentes renovables.
Otros aspectos relevantes
No sólo la eficiencia energética y las fuentes de energías renovables serán tomadas en cuenta en la presente modificación. En general se incluyen nuevas obligaciones de monitorización y medición de las instalaciones, con el fin de aplicar sistemas de automatización y control que redunden en el ahorro y eficiencia de los edificios.
También se adaptara la normativa a las nuevas tecnologías, equipos más eficientes y en general la incorporación de fuentes de energía renovable y de nuevos mínimos en cuanto a requisitos de eficiencia.
Todo el sector, desde fabricantes, pasando por prescriptores e instaladores, esperan la publicación de un RITE 2020 que cambiará el panorama energético de los edificios.